Ayuda para los niños en emergencias en 2022
El niño de la imagen se llama Amanuel Berhanu, y a su corta edad ya está recibiendo alimento terapéutico para tratar de sobrevivir a un episodio de desnutrición aguda, en un centro de salud que apoyamos en Tigray, Etiopía. En brazos de su madre, recibe el tratamiento que necesita para recuperarse. Pero el futuro no es nada halagüeño en este país en el que millones de niños y niñas necesitan ayuda humanitaria urgente.
Somos una organización de emergencias y también de derechos. Y las crisis humanitarias no dejan de aumentar y los derechos de los niños y niñas de ser violados sistemáticamente. Si los conflictos y el cambio climático ya estaban provocando un aumento del número de niños que necesitaban ayuda humanitaria, la llegada de la COVID-19 ha empeorado aún más, si cabe, la situación: su salud física –pero también mental– está en riesgo por el colapso de los sistemas sanitarios, su educación en entredicho por el cierre de escuelas y su bienestar comprometido porque hay más pobreza y, en algunos casos, se ven abocados al trabajo infantil o el matrimonio temprano.
Por eso, en nuestro informe Acción Humanitaria para la Infancia 2022 lanzamos nuestro mayor llamamiento de fondos de la historia: 9.400 millones de dólares (más de 8.300 millones de euros) para poder ofrecerles la asistencia humanitaria que precisan. En 2022, nuestro objetivo es atender las necesidades más urgentes de más de 177 millones de niños y niñas en 145 países y territorios en situación de emergencia.
Es nuestro deber, y el de toda la comunidad internacional, proteger a estos niños, porque cada uno de ellos, independientemente de donde se encuentre, tiene el derecho a la supervivencia y a crecer en un entorno seguro. Trabajando juntos, podemos reimaginar un futuro mejor para todos los niños y niñas.
Nos enfrentamos a graves emergencias:
- Afganistán. La situación humanitaria en el país se vio seriamente afectada por los recientes acontecimientos políticos. Actualmente 12,6 millones de niños necesitan ayuda humanitaria ya que los riesgos para su protección son graves. Más de 10 millones de niños necesitan apoyo para su educación, además de los 4,2 millones que ya están fuera de la escuela. 8 de cada 10 afganos no tiene acceso a agua potable debido a la grave sequía. Los brotes de sarampión y diarrea son devastadores para la infancia. Este año, 1,1 millones de niños se enfrentaron al riesgo de muerte por desnutrición aguda grave.
- Sahel Central (Burkina Faso, Mali y Níger): los niños y niñas de estos países se enfrentan a la inseguridad, desplazamientos forzados, falta de acceso a los servicios básicos y las consecuencias socio-económicas de la COVID-19. Como resultado 7,6 millones de niños y niñas necesitan ayuda humanitaria urgente. En esta región, millones de niños sufren desnutrición aguda grave. La vida diaria en estas comunidades es una pesadilla debido a los ataques a escuelas, centros de salud y hogares.
- Haití. La población más vulnerable está soportando el impacto de los desastres naturales, las crisis políticas y socioeconómicas, la inseguridad de las bandas, los desplazamientos internos y la pandemia de la COVID-19. Se estima que 2,95 millones de personas, de los cuales 1,2 son niños y 400.000 son mujeres embarazadas, necesitan atención de emergencia.
- Myanmar. En este país la situación continúa deteriorándose, los niños y niñas se enfrentan a grandes desafíos por el conflicto, la COVID-19 y la situación económica. Más de 12 millones de niños no han tenido acceso a educación formal en los últimos 18 meses. En torno a 1 millón no han podido acceder a la vacunación rutinaria. Se estima que ahora 14,4 millones de personas, incluyendo 5 millones de niños, necesitan ayuda humanitaria.
- Etiopía. Desde el inicio del conflicto, las familias que viven en el norte del país enfrentan altos niveles de desnutrición e inseguridad alimentaria. El acceso humanitario en Tigray y alrededores (Afar y Amhara) es todo un desafío. En esta región, los niños y niñas tienen necesidad urgente de protección y apoyo, más de 29,4 millones de personas, 15,6 millones de niños y 4,4 millones de personas con discapacidad, necesitan ayuda humanitaria urgente.
- Yemen. Los más de 6 años de conflicto han provocado la peor crisis humanitaria del mundo: el 70% de la población, 11,3 millones de niños, necesita algún tipo de ayuda humanitaria. Desde el inicio del conflicto en marzo de 2015, 10.000 niños han muerto o resultado mutilados.
- Migrantes y refugiados en Europa: solo entre enero y agosto de este año han llegado a Europa 472.000 migrantes y refugiados, de los que 110.000 son niños y niñas, y parece que dicha tendencia se mantendrá en 2022. Unos 10.000 están separados o no acompañados de sus familias.
En 2022 necesitamos ayuda urgente para afrontar grandes retos

NUTRICIÓN
Tratar a 7,2 millones de niños contra la desnutrición aguda grave.

SALUD
Vacunar a 62,1 millones de niños contra el sarampión.

AGUA, SANEAMIENTO E HIGIENE
Facilitar el acceso a agua potable a 53,4 millones de personas.

EDUCACIÓN
Conseguir que 77,1 millones de niños tengan acceso a educación formal o informal.

PROTECCIÓN
Dar ayuda psicosocial a 27,9 millones de niños y sus cuidadores.

AYUDAS EN EFECTIVO
Proporcionar ayuda en efectivo a 23,6 millones de hogares para sus necesidades básicas.

VIOLENCIA DE GÉNERO
Proteger a 21,3 millones de niños, niñas y mujeres contra la violencia de género y atender a los y las supervivientes de dichos episodios.
Con tu ayuda en 2021 protegimos a millones de niños

2,4 millones de niños
tratados contra la desnutrición aguda grave

22,4 millones de niños y mujeres
con atención sanitaria

34 millones de personas
tuvieron acceso a agua potable

110,7 millones de niños
accedieron a la educación formal o informal

5 millones de niños y cuidadores
recibieron apoyo psicosocial

812,2 millones de personas
con mensajes sobre cómo prevenir enfermedades y acceso a servicios sanitarios