Una campaña de vacunación protege a los niños vulnerables en la región fronteriza de Kenia y Somalia

En Liboi, a 90 kilómetros de Dadaab,  Kenia, los trabajadores comunitarios de la salud y los ancianos de la comunidad están haciendo todos los esfuerzos posibles para salvar las vidas de los niños. Con el apoyo de UNICEF, se está llevando a cabo una campaña de vacunación contra la polio y el sarampión a niños menores de cinco años, ya que se encuentran en una situación de gran vulnerabilidad debido a los elevados niveles de desnutrición.

Liboi  y otras comunidades de la región se encuentran frente a una crisis de supervivencia infantil. En circunstancias como éstas, los niños no mueren por lo general debido a la falta de alimentos únicamente, sino que,debilitados por la desnutrición, van perdiendo la capacidad dedefenderse de lasenfermedades.

La zona sufre por partida triple las consecuencias de lasequía, el marcado aumento de los precios de los alimentos y el flujo de los refugiados provenientes de Somalia.

Los habitantes de la región se están volcando con esta campaña para proteger a sus hijos de enfermedades como el sarampión y la poliomielitis, que son potencialmente mortales y que se propagan rápidamente en las épocas de sequía.

La importancia de la participación comunitaria

En el marco de su respuesta a la crisis en el Cuerno de África, UNICEF suministra las vacunas destinadas a las comunidades afectadas por la sequía, comoLiboi.

La región tiene bajas tasas de cobertura de inmunización sistemática, de manera que las probabilidades de que ocurran brotes de enfermedades sonelevadas. A ello se une el elevado flujo de refugiados provenientes de Somalia, donde la cobertura de inmunización también es baja.

Gracias a las labores de movilización que realizan los ancianos de la comunidad, los padres y madres de Liboi llevan a sus hijos a los puestos donde los trabajadores de la salud realizan las labores de vacunación.

El coordinador de la campaña devacunación en este distrito, Mohammed, no pierde las esperanzas. Ha sufrido los efectos de la poliomielitis y está comprometido a garantizar la inmunización de todos los niños menores de cinco años. Así, acompaña personalmente al equipo de trabajadores de la salud comunitarios en sus rondas para asegurarse de que no quede ningún niño sin vacunar.

"Estoy comprometido con todas mis fuerzas y con todo mi corazón con este esfuerzo ", comenta Mohammed. "Yo sé lo que significa para un niño tener poliomielitis, los desafíos que debe superar. Porque yo pasé por todo eso", añade.

Hawa Abdulla, madre de 10 hijos, llevó al menor de tres años, Ayub, para que le vacunaran contra el sarampión y la poliomielitis y le dieran suplementos de vitamina A y pastillas antiparasitarias. Conoce perfectamente la importancia de la inmunización, ya que dos de sus hijos han tenido sarampión. "Para que nuestros hijos estén protegidos es necesario vacunarlos", explica.

Una crisis de supervivencia infantil

Las actividades sanitarias que se llevan a cabo en Liboi forman parte de una campaña de vacunación integral cuyo objetivo consiste en inmunizar a más de 200.000 niños menores de cinco años en las comunidades cercanas a Dadaab.