Malí: dos tercios de las víctimas por artefactos sin explotar son niños

La presencia de municiones y explosivos de guerra sin detonar supone una creciente amenaza para las comunidades del norte y el centro de Malí. Desde abril de 2012, se han producido 60 víctimas a causa de estos restos; dos terceras partes son niños.

El nivel de riesgo podría aumentar aún más a medida que las familias desplazadas regresen a sus casas en las áreas que han sufrido la peor parte del conflicto.

UNICEF calcula que en diciembre de 2012 había al menos100.000 niños expuestos, junto a sus padres, al peligro de las municiones sin explotar (UXO, por sus siglas en inglés) en el norte de Malí.
 
Esta estimación se hizo antes de la intervención militar que, desde enero, ha incluido ataques aéreos y operaciones terrestres. Aproximadamente 200.000 niños de las zonas afectadas por el conflicto en el norte y centro de Malí están en riesgo de sufrir lesiones o de morir debido a los restos explosivos de guerra.
 
"Los niños estaban jugando con un dispositivo en mi patio. Pensé que no había ningún peligro. Lo tiré en una piedra y explotó", dijo Amadou, de 19 años, superviviente de Mopti que perdió el dedo de su mano izquierda. "Cuando me desperté, había sangre por todas partes. Mis dos hermanos, de 4 y 16 años, resultaron heridos. Mi sobrina murió. Ella sólo tenía 18 meses. Me siento triste y culpable", agregó.
 
"El peligro está ahora en cada esquina de las comunidades del centro y norte de Malí, donde se desarrollaron intensos combates", dijo Françoise Gruloos-Ackermans, Representante de UNICEF Malí.
 
"Las explosiones pueden ocurrir en cualquier lugar y en cualquier momento, cuando los niños están de camino a la escuela o cuando una mujer va al mercado (…) Una madre no va a traer a sus hijos al centro de salud si cree que los alrededores están contaminados con artefactos explosivos sin detonar. Un maestro no va a volver a la escuela si el patio está lleno de municiones abandonadas", agregó Ackermans.
 

CAMPAÑAS DE SENSIBILIZACIÓN

Con el fin de proteger mejor a los civiles de la amenaza de los explosivos, los aliados apoyados por UNICEF han realizadoactos públicos durante los últimos cinco mesesen escuelas, mercados y lugares de trabajo para concienciar a unas 27.000 personas.
 
"No estamos siempre con los adultos (…) Si los niños no lo saben, pueden coger una granada u otro explosivo como si fuera un juguete. Ellos no se dan cuenta de que pueden sufrir daños. Si los niños no participan en estas actividades informativas, esto es un problema", dijo Adidiatou, de 13 años, después de asistir a una sesión informativa.
 
A través de emisoras de radio nacionales y comunitarias, se han difundido mensajes en cinco idiomas que pueden salvar vidas. Asimismo, se han producido carteles y otrosmateriales con artistas malienses.
 
En 2013, UNICEF y susaliados tienen previsto aumentar las actividades de información sobre el riesgo de las minas y realizarcampañas de sensibilización en radio, especialmente en las regiones del norte, con el fin desensibilizar a cerca de 400.000 personas de las zonas afectadas por el conflicto.