Angola: el reto de vacunar a todos los niños

"Es un bebé saludable”, dice Katerina sobre su único hijo, Emmanuel, de 6 meses.

"Lo llevo a vacunar para que no enferme”.

Viven en el municipio de Kalumba Kiashi, a las afueras de Luanda, donde ha habido un reciente brote de sarampión. 

Katerina siente que es más importante que nunca que Emmanuel se vacune.

"Cuando vengo aquí me entero de cómo mantener sana a mi familia: la limpieza de la ropa, comer alimentos nutritivos y dormir bajo mosquiteras".

Katerina y su marido han tenido malaria, por lo que quierenproteger a sus hijos contra la enfermedad.

Las campañas de vacunación contra el sarampión han sido elprograma de salud pública de mayor éxito en la última década, con África a la cabeza en el logro de la reducción de la mortalidad en un  89% entre 2000 y 2010.

Y es que UNICEF sabe que todos los niños deben ser vacunados, independientemente de dónde hayan nacido, quiénes son o dónde viven. Vacunar a los niños es una de las formas más eficientes, exitosas y rentables de salvar vidas.

LA IMPORTANCIA DE LLEGAR A LAS ZONAS MÁS REMOTAS

La inmunización se va aintensificar en Angola y en otros7 países cuyas tasas de vacunación son las más bajas del mundo. 

La dificultad de llegar a algunas zonas de Angola evidencia que la intensa guerra civil que terminó en 2002 todavía está latente en gran parte del país.

El nivel de vida es bajo para gran parte de la población y la esperanza de vida y tasas de mortalidad infantil están entre las peores del mundo. 

A pesar de los importantes avances que se han hecho en las últimas décadas, los niños más pobres y que viven en zonas de difícil acceso se han quedado atrás.

UNICEF está trabajando con organizaciones locales, así como con líderes religiosos para llegar a zonas con un número elevado de niños no vacunados, a través de una estrategia llamada RED (Reach Every District).

La estrategia, cuyo objetivo es llegar a todos los distritos, hasta ahora ha alcanzado 97 de los 164 municipios (2010).

El trabajo de UNICEF

UNICEF es el mayor distribuidor mundial de vacunas para los países en desarrollo.

Suministra vacunas para más de un tercio de los niños del mundo, incluyendo a miles de niños vulnerables en Angola.

Hoy en día es posible vacunar a un niño para protegerle de seis de las enfermedades más peligrosas que pueden afectarle: poliomielitis, sarampión, tétanos, tuberculosis, difteria y tosferina.

Nuestros programas de vacunación con nuestros aliados, junto con la educación y las campañas de sensibilización, han erradicado ya la poliomielitis en muchos países de todo el mundo.

Para ello es fundamental lograr un 100% de niños vacunados y, por tanto, protegidos de enfermedades que pueden causarles discapacidades o, incluso, la muerte.