UNICEF PIDE AL MUNDO QUE SE UNA AL TRATADO DE PROHIBICIÓN DE MINAS

Miles de niños en el mundo mueren, son heridos o quedan huérfanos a causa de las minas antipersona. En mucho países, una de cada cinco víctimas de las minas es un niño o una niña

UNICEF hace un llamamiento a todos los países para que se adhieran al Tratado de Prohibición de Minas, que prohibe el uso, el almacenamiento y la producción de minas terrestres. Hasta el momento 144 países han ratificado el acuerdo, que se convirtió en ley en 1999.

UNICEF se une a cientos de organizaciones internacionales, líderes mundiales e individuos afectados por las minas para instar a una acción urgente, en la Cumbre de Nairobi para un Mundo Libre de Minas. Ésta es la primera revisión del tratado y tiene lugar del 29 de noviembre al 3 de diciembre de 2004.

A causa de minas terrestres y las municiones sin explotar descartadas o disparadas por combatientes, miles de niños y niñas de todo el mundo están perdiendo la vida, sufriendo heridas o quedándose huérfanos.

UNICEF: Educación y prevención

Además de trabajar para ayudar a las víctimas de minas y municiones sin explotar, el UNICEF cree que educar sobre el riesgo de las minas es una estrategia fundamental para evitar que un número mayor de niños resulten muertos o mutilados.

En colaboración con aliados locales, el UNICEF financia y capacita a adolescentes para que lleven a cabo actuaciones y juegos de rol en los que se advierte a los niños más jóvenes del peligro de las minas y las municiones sin explotar.

El UNICEF también financia cines itinerantes que atraen al público mostrando películas gratuitas y luego integran a los niños y sus progenitores en una clase sobre seguridad.

"Aunque muchas zonas están señaladas, los niños tienden a entrar en ellas y se convierten en una proporción considerable de las víctimas de las minas", dice Rodney Hatfield, Representante del UNICEF en Camboya.

Carol Bellamy, Directora Ejecutiva del UNICEF, asistirá a la próxima Cumbre de Nairobi para un mundo libre de minas acompañada por Nikola Kokorus de Bosnia, que tiene 14 años y perdió una mano a causa de la explosión de una mina terrestre cuando sólo tenía tres años. Nikola hará un llamado personal en nombre de todas las víctimas de minas terrestres del mundo para que todos los países firmen el Tratado de prohibición de minas que prohíbe el uso, almacenamiento y producción de minas terrestres.

Historias reales

En Camboya, uno de los países más afectados, la mitad de las víctimas de minas terrestres son niños. Hace dos años, Lay Sokhum, de 14 años, pisó una mina mientras trabajaba en el sembrado de su padre cerca de Pailin, en Camboya occidental.

"Después de la explosión vi humo", explicó. "Estaba en el suelo y no sabía lo que había ocurrido. Sólo cuando intenté moverme me di cuenta de que sangraba."

La zona en torno a Pailin es uno de los lugares más peligrosos de la Tierra. Sin embargo, dos décadas después de que los khmeres rojos y sus enemigos desgarraran Camboya, los expertos del Centro Camboyano de Desminado trabajan con tesón buscando minas terrestres y cohetes y granadas sin explotar, en un intento de que la tierra sea segura para los niños y para los nuevos colonos.

La cirugía salvó la vida de Lay, pero no sus piernas. Al principio estaba tan conmocionado y deprimido por su discapacidad, que abandonó la escuela; sin embargo, tras meses de rehabilitación y la colocación de prótesis, puede caminar de un sitio a otro sin ayuda, e incluso ir a la escuela en una bicicleta adquirida con fondos de UNICEF.