Un balance sobre la nutrición: es necesario actuar para librar a la infancia de la amenaza del hambre

Mejorar la nutrición tiene importantísimas repercusiones en la supervivencia infantil. La buena nutrición ayuda a los niños y niñas a crecer, salva vidas e incide favorablemente en el desarrollo humano. El último informe de la serie «Progreso para la Infancia», dedicado a la nutrición destaca la importancia de un compromiso mundial para librar a más de 140 millones de niños y niñas de la amenaza del hambre

Unos 5,6 millones de niños y niñas mueren anualmente debido en parte a que no cuentan connutrientes suficientes y adecuados. Otros 146 millones corren peligro de muerte prematura debido a que tienen peso inferior al normal. La desnutrición y el bajo peso tienen graves consecuencias para la salud de los niños y niñas, aumentando su vulnerabilidad a las infecciones y causando serior problemas en su desarrollo físico y mental.

La comunidad internacional se ha comprometido a reducir a la mitad el número de niños y niñas desnutridos y con bajo peso para 2015. Sin embargo, el informe "Progreso para la Infancia: Un balance sobre la nutrición" advierte que a menos que el mundo tome medidas al respecto, no podrá alcanzar este Objetivo de Desarrollo del Milenio.

La desnutrición es el resultado de la ingesta alimentaria insuficiente, las enfermedades infecciosas reiteradas y la falta de atención y cuidado. La desnutrición atrofia el crecimiento y desarrollo de los niños y niñas, y en el caso de estas últimas, afecta su capacidad de dar a luz hijos saludables en el futuro.

"El hambre y la desnutrición provocan o agravan algunos de los problemas más difíciles de tratar del mundo", afirma Ann M. Veneman, Directora Ejecutiva de UNICEF. "Ambos son factores importantes del ciclo de pobreza, y afectan las posibilidades de desarrollo de niños y niñas, así como su capacidad de resistencia a las enfermedades graves".

"Un mundo sin hambre"

El informe sobre la nutrición es el cuarto de una serie de estudios similares realizados por UNICEF con el fin de dar seguimiento a los progreso de los países en el cumplimiento de sus promesas para mejorar la vida de la niñez.

El informe indica que la mitad de los niños y niñas con peso inferior al normal viven en Asia Meridional, y que China está al frente de la región de Asia Oriental en lo que se refiere a la reducción de la desnutrición. También señala que en África Occidental y Central el avance en materia de nutrición es lento, mientras que en varios países de Oriente Medio y África Septentrional, como Iraq y Sudán, se registran retrocesos.

Pero el informe aclara también que si los gobiernos deciden dar prioridad a la nutrición, será posible reducir el número de niños y niñas desnutridos. La aplicación de diversas estrategias de eficacia comprobada ha hecho posible el logro de importantes avances. Por ejemplo:

  • Los suplementos de vitamina A han permitido salvar las vidas de centenares de miles de niños y niñas
  • Unos 82 millones de recién nacidos reciben anualmente protección contra la carencia de yodo gracias a las campañas de yoduración de la sal de mesa
  • La lactancia materna exclusiva en los primeros seis meses de vida constituye una de las maneras más simples y rentables de salvar vidas infantiles.

"Me consta que podemos realizar avances rápidos en plazos muy cortos", agregó la Sra. Veneman, que esta semana cumple su primer año en el cargo de Directora Ejecutiva de UNICEF y que también ha sido nombrada Presidenta del Comité Permanente de Nutrición de las Naciones Unidas. "No hay un objetivo más importante que el que nos hemos fijado: un mundo en el que los niños y niñas puedan vivir libres de la pobreza y sin hambre".