Preocupación por la leche adulterada en China

En un comunicado emitido por las oficinas de UNICEF y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en China, ambas organizaciones manifiestan su preocupación y tristeza por la distribución de leche maternizada contaminada producida por Sanlu y otras empresas. UNICEF recuerda que la leche materna es siempre la mejor opción y que las madres deben ser informadas y apoyadas en la lactancia, que beneficia tanto a sus bebés como a ellas mismas. Es necesario evitar la promoción del uso de preparados comerciales en situaciones en los que no son necesarios

Cualquier intento de engañar a los consumidores en lo referente a la producción y comercialización de alimentos es inaceptable, pero este caso de contaminación deliberada de alimentos específicos para bebés y niños pequeños es particularmente deplorable.

Tanto UNICEF como la OMS confían en que las autoridades de seguridad alimentaria de China tomarán acciones rápidas y firmes para investigar a fondo este incidente. También esperan que se refuerce la regulación sobre alimentos infantiles, siguiendo a la investigación y en el contexto de la cada vez mayor atención del gobierno chino hacia la seguridad alimentaria.

La leche materna: un fórmula sin competencia en el mercado

Los expertos mundiales en salud coinciden en que laleche materna es incuestionablemente mejor para la alimentación de los bebés que cualquier fórmula artificial. Ninguna fórmula comercial contiene una combinación tan perfecta de las proteínas, carbohidratos y grasas necesarias para impulsar el crecimiento infantil y el desarrollo intelectual. Ninguna fórmula comercial es tan segura como la leche materna, que no requiere añadir agua potencialmente no potable ni utilizar recipientes que quizás no hayan sido esterilizados. Además, ninguna fórmula comercial es tan asequible para las familias como la leche materna: ninguna es gratuita. La leche materna proporciona una nutrición perfecta a los bebés al tiempo que los protege de infecciones y los inmuniza.

Lo ideal sería que todos los menores de 6 mesesse alimentaran exclusivamente con leche materna. Ningún otro líquido o alimento, ni siquiera el agua, es necesario durante ese periodo. Posteriormente, los niños deberían combinar alimentos adecuados y seguros mientras continúan con la lactancia al menos hasta los 2 años de edad.

Las madres trabajadoras que no pueden alimentar personalmente a sus bebés durante el horario laboral pueden almacenar su leche en recipientes esterilizados para que el bebé pueda ser alimentado en su ausencia. La leche materna puede mantenerse sin problemas hasta 8 horas a temperatura ambiente. Al volver a casa se puede continuar con las tomas normales. De este modo los bebés de madres que trabajan o que tienen que separarse temporalmente de ellos pueden seguir recibiendo los beneficios de la leche materna.

Todas las madres deberían recibir consejo sobre los beneficios que tiene la leche materna para sus bebés y para ellas mismas. Además es necesario que reciban apoyo para iniciar y mantener la lactancia, tanto por parte de los servicios de salud, en las primeras horas tras el parto, como de la sociedad en su conjunto a lo largo de los meses de lactancia. Padres y madres deberían ser informados sobre los riesgos de contaminación de las fórmulas comerciales, ya sea en su fabricación, al preparar la mezcla en casa o durante el uso. Estos riesgos son una alarmante realidad, no sólo en China, sino en países de todo el mundo. Aquellas mujeres que por razones médicas o por otras razones tengan que recurrir a las fórmulas comerciales deberían ser asesoradas por personal sanitario cualificado.