Los niños y niñas de Myanmar damnificados por el ciclón regresan a la escuela

En Laputta, región meridional del delta del Irrawaddy, las escuelas deberían haber reabierto el mes pasado. Sin embargo, la destrucción y los daños que sufrió casi un 60% de las escuelas públicas de la región como consecuencia del ciclón Nargis impidieron la reanudación de las clases a tiempo.

En los dos meses transcurridos desde el paso del ciclón Nargis por Myanmar, las labores de recuperación y socorro en el delta del Irrawaddy, donde el ciclón provocó los daños más graves, se han desarrollado de manerasatisfactoria. Eso ha posibilitado lareconstrucción de las escuelas de la región. Los establecimientos de enseñanza reconstruidos volvieron a abrir sus puertas hace unas pocas semanas, y más de 6.000 niños y niñas de la región pueden ahora soñar con unfuturo mejor.

UNICEF y sus aliados han levantado amplias tiendas de campaña que funcionan como escuelas y brindan protección a los alumnos y alumnas de las escuelas destruidas. Hasta la fecha se han instalado 123 tiendas de campaña en seis localidades de la región meridional del delta del Irrawaddy, y 56 de ellas ya han recibido pupitres y otros muebles.

Además de las tiendas de campaña y el mobiliario, las escuelas de Laputta y Bogale también recibieron letrinas y tanques de agua.

Pensar en el futuro

"Nuestra escuela primaria quedó reducida a escombros, al igual que todo lo que había en su interior", explicó Daw San San Maw, una maestra de Laputta. "Pero UNICEF nos suministró una tienda de campaña donde ahora funciona la escuela, además de materiales esenciales de enseñanza y aprendizaje y muebles. De manera que los niños y niñas han podido reanudar sus estudios".

El regreso de los niños a clases ha hecho posible que sus vidas recuperaran su ritmo normal, además de darles la oportunidad de pensar en su futuro. "Cuando sea grande, quiero ser doctor" dijo Mg Nyein Htet Aung, de seis años de edad.

La reapertura de las escuelas en la zona afectada por el ciclón les ha devuelto a los niños una sensación de bienestar, además de suministrarles ámbitos seguros y favorables de estudio.

Casi 700.000 niños todavía necesitan ayuda en Myanmar

Casi tres meses después de que el ciclón Nargis azotase Myanmar, todavía hay casi 17.000 niños de menos de 17 años que necesitan ayuda según UNICEF. Unos 2,4 millones de personas se vieron afectadas por el ciclón, que destruyó miles de casas, escuelas y centros de salud.

“Aunque hemos observado mejoras en la situación de los niños y hemos conseguido evitar el brote de enfermedades, necesitamos seguir dedicando todos nuestros esfuerzos para que los niños y sus familias puedan recuperarse totalmente de la devastación causada por el ciclón Nargis", afirmó el Representante de UNICEF en Myanmar, Ramesh Shrestha.

La acción de UNICEF en Myanmar se ha centrado en inmunización, educación y reunificación de las familias separadas. Se han distribuido numerosas "escuelas en una maleta" y kits de juegos para los niños de las áreas afectadas, y se han construido espacios educativos temporales mientras se reconstruyen las escuelas que habían quedado totalmente destruidas.

Un informe reciente de Naciones Unidas y ASEAN reveló las cifras de los inmensos daños causados por el ciclón Nargis. Entre los destrozos, se han contabilizado 700.000 hogares, el 75% de los centros de salud y más de 4.000 escuelas en las áreas afectadas. Además, el ciclón supuso un duro golpe para la vida de muchas familias, inundando 600.000 hectáreas de tierra fértil y matando a más del 50 por ciento del ganado, destruyendo los barcos de pesca o los almacenes de alimento. Según este informe, los daños y pérdidas se han valorado en 4.000 millones de dólares.