Espacios amigos de la infancia para los niños afectados por las inundaciones en Pakistán

Pakistán sigue sufriendo las consecuencias de las inundaciones. Todavía son muchas las familias que se ven obligadas a vivir en refugios temporales, con escasos recursos, donde los niños sufren aislamiento y tienen un acceso limitado a la educación escolar.

Ante esta situación, UNICEF y sus aliados centran todos sus esfuerzos en ayudar a los niños y familias afectados por las inundaciones. Ello se materializa principalmente en la creación de espacios amigos de la infancia, que son ámbitos donde los menores pueden aprender y jugar seguros, para así tener la oportunidad de regresar lo antes posible a la normalidad.

En estos espacios, los niños adquieren aptitudes prácticas para la vida y reciben el apoyo psicosocial que necesitan. Además, llevan a cabo actividades lúdicas para superar los traumas causados por las situaciones que han tenido que vivir con la emergencia.

La historia de Rehana

Rehana, de 12 años, es una niña con necesidades especiales que continúa sufriendo las consecuencias de las inundaciones. Tuvo que huir de su hogar en la provincia paquistaní de Sindh y ahora reside con su numerosa familia en una de las 350 viviendas que se dispusieron para unas 700 familias desplazadas en la misma provincia.

 La vida de Rehana mejoró, tal y como ella explica, cuando se instaló en la región un espacio amigo de la infancia, que a principios de octubre recibía unos 150 niños en dos turnos. "Cuando llegamos aquí estábamos muy deprimidos, pero poco después varios trabajadores sociales inauguraron el centro y nos invitaron a todos a participar", cuenta. "Son muy bondadosos. Allí nos entretenemos, dibujamos y hasta tenemos muñecas para jugar. Yo tenía una muñeca en mi casa, pero se perdió con las inundaciones".

"Al principio, Rehana estaba muy asustada por todo lo que había sufrido. No confiaba en nadie", explica Noor, una especialista en derechos de los niños del programa de desarrollo rural Thardeep, una ONG aliada de UNICEF. "Pensaba que no era lo suficientemente buena, porque no podía oír ni hablar como los demás niños. Comenzamos a trabajar intensamente con ella para ayudarle a que superara sus temores y recuperara su autoestima". Estos espacios prestan una valiosa ayuda a los niños con necesidades especiales, que sufren a menudo violencia, abuso y explotación.

Atención a los más vulnerables

UNICEF y sus aliados han puesto en marcha más de 200 espacios amigos de la infancia y un centenar de equipos móviles para prestar apoyo psicosocial a los menores de las regiones más aisladas y apartadas de Pakistán.

De acuerdo con Jabeen Fatima Abbas, Especialista en Protección Infantil de UNICEF, en Pakistán queda todavía mucho por hacer: "Aunque algunas personas ya están regresando a sus hogares, muchas familias deberán permanecer aquí durante varios meses más". "Y debido a la inminencia del invierno, hay que redoblar nuestros esfuerzos".