UNICEF proporciona ayuda de emergencia a las personas desplazadas en Níger

Mientras miles de personas huyen a Níger para escapar del conflicto en el Norte de Malí, UNICEF junto con el gobierno de Níger, organizaciones no gubernamentales y otras agencias de Naciones Unidas, está intensificando los esfuerzos para responder a las necesidades inmediatas de las familias desplazadas.

“Es un alivio recibir algunas mantas y beber agua hoy, así mis hijos podrán estar más cómodos y no tendrán que dormir más sobre el polvo”, afirma Fatuma Mathala.
Mathala, embarazada de seis meses, y sus cuatro hijos, de 2, 3, 4 y 6 años, viajaron durante días para llegar a un refugio temporal en Mangaizé, una aldea en la región de Ouallam, aproximadamente a 100 kilómetros de la frontera entre Níger y Malí.

“Dejamos todo lo que teníamos. No nos queda nada. La situación aquí es terrible. Estamos durmiendo al aire libre con poca comida y agua”, explica. Hasta la fecha, más de 12.000 personas- de los cuales algunos son niños y mujeres- han llegado a Níger huyendo de los enfrentamientos entre los Tuareg ylas fuerzas gubernamentales que comenzaron el pasado mes en la región Azawad, al norte de Malí.

La ayuda comienza a llegar

El asentamiento de Mangaizé, que se extiende sobre un paisaje árido vacío, ahora alberga 1.900 personas en cientos de refugios hechos con palos, mantas de colores, telas y alfombras.

La afluencia de refugiados se produce en medio de la grave crisis nutricional que afecta a Nígery otros países en toda la región del Sahel. La mayoría de los que huyen de la violencia en Malí se encuentran en asentamientos ubicados en las áreas peor afectadas por la sequía y las malas cosechas, agravando aún más la escasez de agua y alimentos.

En la región Ouallam, el 40% de la población está ya sufriendo inseguridad alimentaria o en riesgo de sufrirla. En Sinegodar y Mangaizé, áreas desérticas inhóspitas donde hay escasez de agua, UNICEF está proporcionando agua potable a través de tanques de agua.

“Nuestra prioridad es continuar proporcionando los recursos básicos y que salvan vidas, como agua y otros suministros, para satisfacer las necesidades inmediatas de las personas en riesgo, en estrecha colaboración con el Gobierno y nuestros aliados”, afirma Guido Cornale, Representante de UNICEF en Níger.

Los niños necesitan un apoyo especial

Muchos niños están sufriendo el trauma del conflicto y la pérdida de familiares. “Vi a hombres enmascarados forzando nuestra puerta”, cuenta Abdoulaye Abdourahmane, de 11 años, recordando los horrores que experimentó antes de huir de Malí. “Mataron a mi padre, mi madre y mis hermanas”.

La protección de la infancia es una prioridad para UNICEF, que apoyará los servicios psicosociales y losEspacios Amigos de la Infancia, que permitirán a los niños sentirse seguros para jugar y recuperar un cierto sentido de la normalidad.

UNICEF sigue movilizando apoyo

UNICEF continuará distribuyendo suministros para salvar vidas y kits de Escuelas en una Maleta en las áreas afectadas. Un grupo de especialistas está trabajando con las autoridades locales y los centros de salud para aumentar su capacidad de tratamiento.

UNICEF y sus aliados hacen un llamamiento a la comunidad internacional para aumentar el flujo de suministros de emergencia y servicios para todos aquellos afectados por el conflicto y la crisis alimentaria emergente.