Niños en riesgo en el campamento de Shousha

Los más de 4.000 refugiados que viven en el campamento de Shousha, ubicado en la frontera de Libia con Túnez, se enfrentan a nuevos peligros: la semana pasada, un incendio provocado como consecuencia del aumento de las tensiones, destruyó casi dos terceras partes del campamento.

Entre los refugiados se encuentran más de 900 niños, muchos de los cuales no tienen manera de volver a sus países. En una entrevista telefónica, la Representante de UNICEF en Túnez, Maria-Luisa Fornara, ha contado lo desgarrador que  ha sido ver las caras de decepción de los niños que acababan de empezar a ir a una escuela creada por la organización.

ACNUR, el organismo para los refugiados de la ONU ha hecho un llamamiento urgente para reconstruir el campamento y reasentar a los refugiados. Muchos de ellos llevan en Ras Jdir más de tres meses. La mayor parte son trabajadores migrantes procedentes del Chad, Eritrea, Iraq, Somalia, Sudán y otros países que están sumidos en sus propios conflictos. No pueden volver a casa.

Preocupación por los niños

"Teníamos 150 niños matriculados en la escuela primaria y secundaria en este campamento. Por desgracia,todos los servicios que UNICEFhabía establecido junto

con Save the Children han sido completamente saqueados ydestruidos", señaló  Fornara.

"Vi a estos niños hace apenas unos días jugando en el patio de recreo que se había dispuesto para ellos, yendo a la escuela con sus propios libros y lápices, y beneficiándose realmente de un espacio de esparcimiento seguro", añadió Fornara.

Muchos de estos mismos niños ya habían estado expuestos a la violencia y los equipos de psicólogos de UNICEF, que ya habían trabajado para restaurar la confianza de los niños, tienen ahora nuevos desafíos.

"También estamos verificando la situación de los niñosno acompañados y separados". "Se ha identificado a alrededor de 100 desde el inicio de la afluencia de inmigrantes", añadió la Representante de UNICEF en Túnez. "Este es un motivo de preocupación, y estamos tratando de reubicar a todos los niños no acompañados y separados en lugares seguros".

Obstáculos a la ayuda

Los problemas de seguridad se han convertido en elprincipal obstáculo para el trabajo de UNICEF y cada vez es más difícil llegar a las familias en situación de riesgo.

Con el fin de satisfacer las necesidades básicas de las personas que viven en el campamento Shousha, UNICEF y sus aliados han pedido apoyo financiero adicional a la comunidad internacional.