COVID-19: el puente aéreo humanitario de la UE hace posible la entrega de más de 50 toneladas de suministros de UNICEF para familias y niños vulnerables

En las últimas 4 semanas, UNICEF ha podido enviar más de 50 toneladas de suministros para combatir el coronavirus en Afganistán, Burkina Faso, República Democrática del Congo (RDC) y Sudán a bordo de un total de 8 vuelos del puente aéreo humanitario de la UE.

El puente aéreo humanitario de la UE se creó a principios de mayo de 2020. El objetivo es ayudar a los países a responder a los desafíos creados por la pandemia COVID-19 que afecta el flujo de ayuda y trabajadores humanitarios. La carga de UNICEF incluía vacunas, equipos médicos y otros suministros de salud para ayudar a los niños y sus familias, y para apoyar a los países a mantener los servicios de salud esenciales durante la pandemia.

“A través de las operaciones del puente aéreo humanitario, la UE permite que la ayuda humanitaria continúe llegando a las personas que más lo necesitan. Estas operaciones permiten también la entrega de suministros que ayudan a prevenir la propagación de COVID-19. Hasta la fecha, se han operado más de 20 de estos vuelos a algunos de los países más vulnerables”, ha dicho Janez Lenarčič, Comisionado para la Gestión de Crisis de la Unión Europea.

A pesar de las restricciones provocadas por la pandemia de COVID-19, UNICEF continuó con su trabajo para garantizar la distribución y entrega de suministros de primera necesidad y mitigar el impacto que los bloqueos globales en este ámbito podrían suponer para la vida de los niños.

"UNICEF agradece el apoyo de la Unión Europea, que está favoreciendo la llegada de suministros que salvan vidas para los niños y sus comunidades", dijo Etleva Kadilli, directora de la sede de suministros y adquisiciones de UNICEF. "A través de una fuerte colaboración con los gobiernos, las empresas y los aliados, podemos superar los enormes desafíos provocados por la pandemia y acelerar los esfuerzos para llegar a todos los niños".

A mediados de marzo, los vuelos comerciales disminuyeron hasta en un 80% con aumentos considerables en los costes para cargar los aviones, lo que hace cada vez más difícil enviar suministros críticos a los países. Un estudio reciente de Lancet indicó que las interrupciones en las cadenas de suministro médico y la disminución en el uso de los servicios de salud debido a la pandemia podrían conducir a un aumento alarmante de muertes infantiles y maternas en 118 países.

La semana pasada, llegaron suministros de salud básicos a Uagadugú, Burkina Faso, entre los que se incluían equipos para combatir el COVID-19 en el país, así como suministros vitales de nutrición.

El envío humanitario mediante el puente aéreo para Afganistán incluyó 26 toneladas métricas de vacunas y suministros relacionados con la inmunización para proteger a los niños de enfermedades como la poliomielitis, la neumonía, la difteria, el tétanos y la tos ferina. Esto es crítico en un país donde solo la mitad de los niños están completamente inmunizados y los servicios de vacunación rutinaria se han visto interrumpidos por la pandemia.

Los envíos a la República Democrática del Congo, donde más del 42% de los niños menores de cinco años se ven afectados por la desnutrición crónica, incluyeron suministros para tratar la desnutrición infantil junto con otros suministros médicos esenciales: kits de reanimación, equipos quirúrgicos básicos, cánulas nasales, oxígeno, hidrocortisona, antibióticos, vitamina A o soporte nutricional, entre otros. Los suministros se distribuirán a centros de salud y hospitales en todo el país.

El envío a Sudán contenía suministros médicos, kits de nutrición y materiales educativos para apoyar las necesidades vitales de salud de los niños y las familias, mitigar la propagación y los impactos de COVID-19 y proteger al personal de salud y los trabajadores esenciales en la primera línea de la respuesta de COVID-19 en el país.

El puente aéreo humanitario de la UE, forma parte de la respuesta global de la UE a la pandemia COVID-19 y tiene como objetivo apoyar la respuesta humanitaria en el país receptor para llegar a los más vulnerables, complementando así el trabajo del sistema de Naciones Unidas. El servicio se opera en un esfuerzo conjunto del Equipo Europa, que reúne a la Comisión Europea y sus Estados miembros.