El conflicto y la hambruna en Sudán del Sur amenazan a los niños

En el conflicto de Sudán del Sur, la temporada seca es sinónimo de malas noticias por el repunte de la violencia y la aparición de la hambruna.
Conflicto en Sudán del Sur: después de la tormenta llega... la guerra

Hace ya un par de meses que la lluvia abandonó, un año más, al país más joven del mundo. Los caminos se han secado, permitiendo el paso de personas y organizaciones humanitarias, pero también de los grupos armados enfrentados en el conflicto de Sudán del Sur

La temporada seca está trayendo consigo un aumento exponencial de la violencia, especialmente en las regiones del Alto Nilo y de Ecuatoria. Además, la mala cosecha, los más de 3 años de conflicto y la insostenible situación económica, también han provocado que se declare la hambruna en algunas zonas del país, lo que significa que la situación nutricional ha llegado a niveles alarmantes. Como siempre, los más afectados son los niños

Nuestros compañeros en Sudán del Sur nos cuentan que, cuando se produce un ataque sobre una población solo hay caos, confusión y... muerte. La gente corre en todas direcciones para ponerse a salvo. Atemorizados, se esconden donde pueden: entre los arbustos, en los pantanos, en otros pueblos... 

Muchas familias quedan rotas para siempre en estos ataques. Los padres intentan poner a sus hijos a salvo como pueden. A veces solo les queda la opción de subirlos a una canoa y esperar que el río les lleve a algún lugar seguro, sabiendo que probablemente no vuelvan a verlos nunca.

Hambruna en Sudán del Sur: una crónica anunciada

En UNICEF llevamos mucho tiempo alertando del agravamiento de la situación nutricional en el país. La declaración de la hambruna era una crónica anunciada desde hacía mucho tiempo, ya que la población lleva más de 3 años sufriendo los estragos de la violencia. 

La disponibilidad de alimentos es cada vez más limitada debido a la reducción de la cosecha, la inseguridad y la altísima inflación (por encima del 800%). Muchas familias sobreviven a base de nenúfares o semillas y apenas comen una vez al día. Se calcula que 1,1 millones de niños sufren desnutrición aguda en el país.

El conflicto y la hambruna en Sudán del Sur amenazan a los niños

Además, la hambruna podría seguir extendiéndose por el país y ser solo el principio de muchas malas noticias. Se calcula que 4,9 millones de personas sufren inseguridad alimentaria, una cifra que podría aumentar hasta los 5,5 millones de personas (la mitad de la población) a mitad de año.

Conflicto en Sudán del Sur: nuestro trabajo

En el contexto de inseguridad actual, el trabajo de las organizaciones humanitarias es cada vez más difícil y esto tiene un impacto directo en la vida de los niños de Sudán del Sur

A pesar de la violencia, nuestros compañeros de UNICEF en Sudán del Sur trabajan sin descanso para paliar las consecuencias del conflicto y de la hambruna. Como parte de la respuesta de emergencia, hemos activado los equipos de respuesta rápida para atender las necesidades nutricionales de 20.000 niños en zonas de difícil acceso durante las próximas semanas.

Además, como consecuencia de su compromiso con los niños de este país, nuestros compañeros consiguieron increíbles resultados el año pasado. Os los contamos:

  • Más de 740.000 personas tuvieron acceso a agua potable
  • Más de 200.000 niños recibieron tratamiento contra la desnutrición aguda grave
  • Más de 600.000 niños fueron vacunados contra el sarampión.
  • Más de 310.000 niños tuvieron acceso a educación en emergencias.
  • Más de 690.000 niños accedieron a servicios de protección contra abusos, malos tratos y violencia.

Ahora que la crisis en Sudán del Sur se agrava cada día que pasa, te necesitamos más que nunca para llegar hasta el último niño en este país. Si puedes, dona para ayudar a los niños que viven en Sudán del Sur y en otras situaciones de emergencia. 

1 de cada 4 niños en el mundo vive en situación de emergencia

535 millones de niños viven en países afectados por situaciones de emergencia. Ya sea por conflictos armados o por desastres naturales, las crisis humanitarias amenazan las vidas y el futuro de niñas y niños. El Fondo de Emergencia nos permite tener recursos para ayudarlos, tanto en los primeros minutos como en situaciones prolongadas en el tiempo. Y gracias a ti, podremos actuar dónde y cuándo más se necesite.

En 2017 necesitamos fondos para llegar a 48 millones de niños que necesitan asistencia urgente en 48 países. Ayúdanos a ayudarlos.

Dona ahora