Proteger a los niños sirios refugiados en Jordania

En el antiguo campo de aviación cerca de la ciudad de Mafraq, al norte de Jordania, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados y UNICEF están viendo con urgencia cómo convertir la tierra inhóspita que les rodea en un lugar adecuado para albergar a más de 150.000 desplazados sirios.

En el desierto se levantará un centro de emergencias con tiendas de campaña, fuentes de agua potable, baños, puntos de distribución de alimentos, centros de salud, espacios amigos de la infancia y escuelas de emergencia. Se conocerá con el nombre de Za’atari, y se espera que ocupe en torno a 9 kilómetros, de los cuales 3,5 estarán ocupados por las familias desplazadas. “UNICEF y sus aliados están inmersos en una carrera contrarreloj para conseguir un espacio en el que instalar las tiendas”, dijo el Representante de UNICEF en Jordania, Dominique Hyde, a la vez que ha recordado que el número de sirios desplazados que cruzan la frontera ha aumentado dramáticamente en la última semana.Más de 30.000 refugiados sirios han huido hacia Jordania, y cada día van llegando más. Solo la semana pasada, más de 3.300 refugiados sirios huyeron a Jordania. Como consecuencia, las instalaciones de tránsito existentes en las inmediaciones de Ramtha están saturadas. Las instalaciones de tránsito de Bashabshe, por ejemplo, donde se registran los refugiados sirios nada más llegar a Jordania, tienen capacidad para 500 personas, pero normalmente albergan a más de 2.000. En ocasiones llegan hasta 2.500 personas a la vez.

La historia de Lama y su familia, refugiados en Bashable

Entre los recién llegados a este centro se encuentra unafamilia de 6 miembros. Lama relata cómo su marido y sus cuatro hijos, de entre 3 y 10 años, llegaron hace tres días después de pasar meses desplazados dentro de Siria. “Se escuchaban disparos continuamente. Asesinaron a mi cuñada y a mi sobrina, y mi cuñado y dos de sus hijos resultaron heridos. Decidimos huir para escapar de la violencia”, afirma. Mientras escapaban, hubo un tiroteo e hirieron a su marido en una pierna. Lama explica cómo todo esto está afectando al comportamiento de sus hijos. “Vieron personas que habían sido asesinadas, y esto les ha afectado. No hablan mucho. Y a veces tienen comportamientos violentos”.Sus dos hijos mayores no pudieron asistir a la escuela el año pasado, ya que incluso cuando estaba abierta, era demasiado peligroso salir a la calle, cuenta Lama.

Aumentar la respuesta humanitaria

UNICEF proporciona servicios de agua y saneamiento básicos en Bashabshe y otras dos instalaciones de tránsito en Ramtha, para llegar a 9.000 desplazados sirios. Estos servicios se complementan con formación sobre agua y saneamiento.   Además, UNICEF ofrece actividades psicosociales a los niños y sus familias, en las que han participado más de 6.500 personas. Paralelamente, se distribuirán en las próximas semanas cerca de 3.000 kits de higiene. Lama y su familia dejarán Bashabshe pronto para unirse a sus familiares en otra parte de Jordania. Pero el número de refugiados no deja de aumentar. Casi 100.000 sirios están registrados como refugiados en Jordania y en otros tres países de la región- Líbano, Turquía eIraq.  Casi la mitad son niños y jóvenes.