Salud y educación para empezar de cero

El 3 de junio de 2018, el Volcán de Fuego, situado en el centro-sur de Guatemala, inició su segunda erupción del año con fuertes explosiones. Poco después se levantaron columnas de ceniza a 15.000 metros sobre el nivel del mar, que se desplazaron hacia el oeste y el suroeste.
Como consecuencia de la erupción, varias comunidades quedaron enterradas entre el material volcánico y 169 personas murieron. Además, las gruesas nubes de ceniza y el material obligaron al cierre de carreteras y centenares de personas tuvieron que ser evacuadas y reubicadas en refugios temporales.
La erupción del Volcán de Fuego dejó más de 1,7 millones de afectados, de los que unos 663.467 eran niñas y niños. Escuintla, Sacatepéquez y Chimaltenango fueron las regiones del país más afectadas.
Juana Cristina
Juana Cristina tiene tan solo 6 años, pero los casi 4 metros de lava, barro y cenizas que cubrieron su hogar -en la comunidad de El Rodeo (departamento de Escuintla, sur de Guatemala)- no lograron borrarle la sonrisa.
Unos días después de la erupción del Volcán de Fuego, se mostraba entusiasmada eligiendo uno de los muchos juegos que nuestros equipos de UNICEF entregaron en el refugio temporal donde se alojaba junto a su familia.

UNICEF en acción
En UNICEF trabajamos contra reloj para proporcionar apoyo y servicios esenciales a los más de 650.000 niños y adolescentes que vivían en las áreas afectadas por la erupción del volcán.
Nuestros equipos realizaron una evaluación de la situación, junto con el Gobierno de Guatemala y sus aliados, para determinar las necesidades más urgentes de los niños y sus familias, y coordinar las acciones de respuesta, que incluyeron:
- Proporcionar ayuda psicológica a los niños afectados y sus familias.
- Apoyar la reunificación familiar para niños separados.
- Asegurar la protección de los niños en los refugios.
- Suministrar agua, higiene y saneamiento adecuados.
- Instalar espacios amigos de la infancia.
- Contribuir a una nutrición adecuada para los niños, subrayando los beneficios de la lactancia materna para los bebés.
- Garantizar que la educación no se vea interrumpida y los niños puedan volver a la escuela lo antes posible.
En 2018 conseguimos grandes resultados
1.285
niños y sus familias con ayuda psicológica.
60
retretes portátiles y 16 instalaciones de lavado de manos en Escuintla y Alotenango.
1.000
personas en albergues temporales con agua potable.