Niños perdidos en Cox’s Bazar
Vivir en un campo de refugiados es tremendamente duro, sobre todo cuando eres un niño o una niña. Pero hay algo mucho peor que vivir en un campo de refugiados y es, desaparecer en él.
Jannat Ara, desaparecida con 16 años.
UNICEF ha detectado un aumento en la cantidad de niños rohingya desaparecidos en los campos de refugiados de Cox’s Bazar.
En el caso de las niñas suelen ser atrapadas para ser explotadas laboralmente como empleadas domésticas, trabajadoras en hoteles o restaurantes, empleadas en granjas, supermercados y fábricas. También son secuestradas para ser explotadas sexualmente, en redes de prostitución o en matrimonios forzados.
Los niños, sin embargo, suelen ser captados para realizar actividades ilícitas como el tráfico de drogas.
El gran problema con el que se enfrenta UNICEF es demostrar estas desapariciones, porque en muchos de los casos o no se denuncian, o ni siquiera hay forma de demostrar que el menor desaparecido existe, ya que no está registrado en ningún sitio. Por esto, el problema de las desapariciones puede ser mucho mayor de lo que se sospecha.
Fatima, madre de Jannat sospecha que su hija ha sido secuestrada para un matrimonio forzado.
La pobreza y la falta de oportunidades en los campamentos de refugiados favorecen esta explotación. La gente intenta buscar en otros sitios una oportunidad y, siguiendo falsas promesas caen en las redes de tráfico de personas. Al mismo tiempo los refugiados rohingya tienen prohibido buscar trabajo fuera de los campamentos, dependiendo totalmente de la ayuda humanitaria. En estas condiciones, muchas familias mandan a sus hijos a realizar trabajos peligrosos, ya que no encuentran otras medidas de subsistencia.
UNICEF ya ha puesto en marcha un importante protocolo para intentar atajar estas desapariciones:
- Junto con el resto de ONGs que colabora, ha establecido una base de datos única de desapariciones para conocer la magnitud del problema. A partir de esta se puede prestar una asistencia mucho más eficaz a las familias que han sufrido una desaparición.
La hija de Kulsum Bahar desapareció con 8 años cuando volvía de un centro de aprendizaje.
- Se están realizando tareas de prevención, orientando a niños y adolescentes sobre los peligros de la trata desde los centros de usos múltiples, los centros sociales y educativos.
- UNICEF también está creando refugios para niños y niñas víctimas de trata con apoyo psicosocial y suministros básicos.
- Se están creando materiales para concienciar a la comunidad y programas de radio para atajar este problema y creando protocolos de actuación con las autoridades.
- Por último, la educación y la formación a adolescentes realizadas por UNCEF, son imprescindibles para que niños y jóvenes puedan labrarse un futuro fuera de las redes de explotación.
En los centros de aprendizaje ahora los niños aprenden a evitar los peligros.
Con tu ayuda, evitamos uno de los riesgos más aterradores a los que se enfrentan niños y niñas en los campamentos de refugiados rohingya, ayudándoles a construir un futuro que les aleje del peligro, para que ningún niño se pierda nunca más.