Un nuevo brote de cólera pone en peligro a 1,2 millones de niños y niñas en Haití en medio de la creciente inseguridad
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PUERTO PRÍNCIPE/NUEVA YORK, 5 de octubre de 2022 - El resurgimiento del cólera en Haití, país azotado por la violencia, después de tres años sin un solo caso reportado, amenaza el bienestar y la salud de 1,2 millones de niños y niñas que viven en la capital, Puerto Príncipe, según ha advertido UNICEF.
Mientras el país sufre enfrentamientos entre grupos armados y protestas violentas por la subida de los precios, se ha informado de siete muertos y cinco casos positivos confirmados. Se están investigando otros 60 casos sospechosos en el área metropolitana de Puerto Príncipe. Médicos Sin Fronteras (MsF) también informó recientemente de que un niño de tres años murió de cólera, enfermedad transmitida por el agua que causa diarrea aguda y puede ser letal si no se trata en las primeras horas.
“Con el aumento de la violencia y la inseguridad, muchas de las familias haitianas más pobres no tienen otra opción que beber y usar agua no potable”, ha señalado el representante de UNICEF en Haití, Bruno Maes. “Las familias no pueden comprar jabón para lavarse las manos, no se recoge la basura en las calles, los hospitales están cerrados o no pueden operar. Todos estos ingredientes han convertido a Haití en una bomba de relojería para el cólera. Ahora ha explotado”, ha añadido.
El recrudecimiento del cólera se produce cuando el malestar social y la violencia invaden el país, lo que restringe o retrasa la prestación de servicios básicos, incluidos los hospitales y las instalaciones de suministro de agua. Como consecuencia, 17 de las 22 estructuras sanitarias principales corren el riesgo de cerrar por falta de combustible. Unos 50.000 niños y niñas y recién nacidos podrían no recibir atención médica en las próximas semanas, mientras que unas 7.000 víctimas de violencia sexual podrían quedar sin tratamiento a finales de año. Además, tres cuartas partes de los principales hospitales de Haití no brindan servicios regulares debido a la crisis del combustible, la inseguridad y los saqueos.
Los niños, niñas y sus familias necesitadas tampoco pueden acceder a los suministros humanitarios debido a la violencia. Los suministros enviados al puerto de Puerto Príncipe no se están distribuyendo dentro del país porque el puerto está controlado por grupos armados. El acceso a áreas donde hay casos confirmados o sospechosos de cólera sigue siendo un desafío debido a la inseguridad, mientras que la crisis del combustible complica aún más la respuesta al nuevo brote de cólera.
Según los últimos datos disponibles sobre desnutrición de Cité Soleil, que registró el primer caso de cólera en el país, uno de cada cinco niños y niñas menores de cinco años sufre desnutrición aguda grave o moderada. Debido a la escasez de servicios básicos en Cité Soleil, existe la preocupación de que muchos niños y niñas puedan morir a causa del cólera.
UNICEF ha preparado una reserva de contingencia para ayudar al Gobierno de Haití a responder a este nuevo gran brote de cólera:
- 755.000 pastillas potabilizadoras de agua para 15.000 personas durante 15 días.
- 28.230 pastillas de jabón para 14.000 personas durante un mes.
- 20 depósitos de 10 metros cúbicos de agua, 10 depósitos de 5 metros cúbicos y 30 tanques a disposición de la Agencia Nacional de Agua y Saneamiento de Haití (DINEPA).
Por otra parte, se ha realizado un pedido de 80 bidones de cloro de 45 kg, por un total de 3.600 kg, para apoyar a la DINEPA en la cloración del agua en Puerto Príncipe, la desinfección de los hogares afectados y el abastecimiento de los centros de salud en las zonas afectadas.
“El cólera puede propagarse fácilmente como un reguero de pólvora por todo Haití si las personas siguen sin tener acceso a los servicios básicos de salud, agua e higiene, o estos tienen un acceso limitado debido a la inseguridad (…) Para reducir los riesgos de un brote importante, nuestra preocupación más urgente no es solo adquirir y repartir agua potable, cloro y jabón, sino también encontrar formas de llegar a las familias más pobres en las áreas controladas por las pandillas”, ha explicado Maes.
La respuesta humanitaria de UNICEF en Haití sigue estando gravemente infrafinanciada. Hasta la fecha, solo se ha recibido el 20,2% de los fondos necesarios para dar acceso a agua limpia a dos millones de personas, una de las principales intervenciones para proteger a los niños de enfermedades mortales transmitidas por el agua y prevenir la desnutrición.
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