Un futuro hipotecado: no estamos ofreciendo a los niños una vida saludable ni un clima adecuado
España ocupa el puesto 17 de un total de 180 países en cuanto al nivel de desarrollo y bienestar para los niños, pero baja al 136 en emisiones de C02 per cápita.
19/02/202019
Ningún país está protegiendo adecuadamente la salud de los niños ni su medioambiente y su futuro, según un informe histórico publicado por una Comisión de más de 40 expertos en salud de la infancia y la adolescencia de todo el mundo. Esta Comisión fue convocada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), UNICEF y la revista The Lancet.
En el informe, A future for the world’s children? (¿Qué futuro les espera a los niños del mundo?), se revela que la salud y el futuro de todos los niños y adolescentes se encuentran en peligro inmediato debido a la degradación ecológica, el cambio climático y las prácticas de comercialización explotadoras que empujan a los niños a consumir comida rápida muy procesada, bebidas azucaradas, alcohol y tabaco.
"Se calcula que alrededor de 250 millones de niños menores de cinco años de países de ingresos bajos y medios corren el riesgo de no alcanzar su potencial de desarrollo sobre la base de medidas indirectas del retraso del crecimiento y la pobreza", afirma la primera ministra de Nueva Zelanda y copresidenta de la Comisión, Helen Clark.
España: 17º en desarrollo infantil, 136 en C02
El informe incluye un nuevo Índice mundial de 180 países en el que se comparan sus resultados sobre:
- Supervivencia y bienestar infantil, que incluyen la salud, la educación y la nutrición.
- Sostenibilidad, con un indicador para las emisiones de gases de efecto invernadero.
- Equidad o desigualdad de ingresos.
Según el informe, aunque los países más pobres deben redoblar los esfuerzos para que sus niños tengan vidas saludables, las excesivas emisiones de carbono –desproporcionadas en el caso de los países más ricos– ponen en peligro el futuro de toda la infancia.
Si, según las proyecciones actuales, el calentamiento global supera 4°C en el año 2100, las consecuencias para la salud de los niños serán devastadoras debido al aumento en el nivel de los océanos, las olas de calor, la proliferación de enfermedades como la malaria y el dengue, y la malnutrición.
El Índice muestra que los niños de Noruega, Corea del Sur y Países Bajos tienen las mejores posibilidades de supervivencia y bienestar, mientras que los niños de República Centroafricana, Chad, Somalia, Níger y Malí tienen las peores perspectivas.
Sin embargo, al tomar en consideración las emisiones de CO2 por habitante, los autores encontraron que los países con las mejores posibilidades van rezagados: Noruega se clasificó en el puesto 156; Corea del Su, en el 166; y Países Bajos, en el 160. Cada uno de estos países emite 210% más CO2 por habitante que su meta para 2030. Estados Unidos de América, Australia y Arabia Saudí figuran entre los 10 países que más emisiones generan.
España ocupa el puesto 17 de un total de 180 países en cuanto al nivel de desarrollo y bienestar para los niños, pero baja al 136 en emisiones de C02 per cápita.
El informe también hace hincapié en el peligro que representan las prácticas de comercialización nocivas para los niños. Existen datos concluyentes de que, en algunos países, los niños ven hasta 30.000 anuncios de televisión a lo largo de un año, y de que la exposición de los jóvenes a los anuncios de vapeo (cigarrillo electrónico) aumentó más del 250% en los Estados Unidos en dos años, llegando a más de 24 millones de jóvenes.
En este sentido, la exposición de los niños a la comercialización de comida basura y bebidas azucaradas se asocia con la compra de alimentos no saludables, el sobrepeso y la obesidad, un ejemplo de cómo la comercialización abusiva está relacionada con el aumento alarmante de la obesidad infantil. El número de niños y adolescentes obesos pasó de 11 millones en 1975 a 124 millones en 2016; es decir, se incrementó 11 veces, con graves costes individuales y sociales.
“Desde la crisis climática hasta la obesidad y las prácticas comerciales nocivas, los niños de todo el mundo tienen que enfrentarse a peligros que eran inimaginables hace pocas generaciones. Es hora de replantear la salud infantil, de modo que se considere que los niños y su bienestar son una prioridad en los programas de desarrollo de todos los gobiernos, por encima de todas las demás consideraciones”, asegura nuestra directora ejecutiva, Henrietta Fore,
Un nuevo movimiento mundial por y para los niños
Con objeto de proteger la salud de la infancia y la adolescencia, los autores independientes de la Comisión abogan por crear un nuevo movimiento mundial impulsado por los niños y destinado a ellos. Algunas recomendaciones:
- Detener las emisiones de CO2 con la máxima urgencia.
- Hacer que nuestros esfuerzos por lograr un desarrollo sostenible giren alrededor de los niños y jóvenes.
- Adoptar nuevas políticas y realizar nuevas inversiones en todos los sectores para favorecer la salud de los niños y hacer efectivos sus derechos.
- Incorporar las opiniones de los niños en las decisiones sobre políticas.
- Reforzar las normas nacionales sobre prácticas de comercialización nocivas, con el respaldo de un nuevo Protocolo Facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño.