Afganistán: el invierno amenaza a niños y niñas afectados por los terremotos 

100 días después de los terremotos, la infancia se enfrenta a condiciones invernales potencialmente mortales y la necesidad de ayuda humanitaria sigue siendo apremiante. 
Una niña recoge agua de una camión cisterna de UNICEF

17/01/2024

100 días después de que un terremoto sacudiera la región occidental de Afganistán, UNICEF pide más apoyo para más de 96.000 niños y niñas afectados por las secuelas del seismo. La llegada del invierno, el frío y las bajas temperaturas dificultan más aún su situación.

Más de 1.000 personas, en su mayoría mujeres y niños, perdieron la vida en los terremotos; 21.000 viviendas quedaron destruidas e innumerables familias perdieron sus medios de subsistencia, su ganado y sus cosechas.

"El ambiente en estas aldeas está cargado de sufrimiento. Los niños y las niñas siguen intentando superar la pérdida y el trauma. Las escuelas y los centros de salud de los que dependen han sufrido daños irreparables o han quedado completamente destruidos", afirma Fran Equiza, representante de UNICEF en Afganistán.

A esta situación se suma ahora la llegada del invierno y las temperaturas gélidas, con muchas familias que siguen viviendo en tiendas de campaña o durmiendo a la intemperie: "el invierno ha llegado y las temperaturas rondan bajo cero. Los niños, las niñas y las familias sin hogar viven por la noche en condiciones que ponen en peligro sus vidas, sin forma de calentar sus refugios temporales".

La acción de UNICEF en Afganistán 

100 días desde que la tierra temblara en Afganistán, UNICEF sigue respondiendo a la emergencia sin descanso y apoyando a niños, niñas y familias. Hasta el momento, estos son algunos de nuestros resultados:

  • 90.000 niños, niñas y mujeres recibieron atención médica y nutricional suministrada por equipos de salud y nutrición apoyados por UNICEF.
  • Convertimos instalaciones sanitarias provisionales en medios más permanentes.
  • Instalamos 61 espacios temporales de aprendizaje y 61 espacios amigos de la infancia, donde casi 3.400 niños y niñas, más de la mitad de ellos niñas, pudieron continuar su educación básica. Las obras de rehabilitación de las aulas destruidas comenzarán en breve.
  • Seguimos distribuyendo agua potable en camiones cisterna a casi 19.000 personas.
  • 5.400 familias recibirán transferencias en efectivo para cubrir sus necesidades básicas y apoyarles ante la llegada del invierno.

Ayuda vital para la infancia

A día de hoy, las necesidades siguen siendo grandes y urgentes; la bajada de las temperaturas agrava las dificultades de niños, niñas y familias. Muchos no han podido reconstruir sus hogares. Necesitan urgentemente asistencia sanitaria, agua limpia y un saneamiento adecuado para evitar la propagación de enfermedades y poner fin a nuevos sufrimientos.

Además, las familias que han perdido sus medios de subsistencia y sus cosechas corren el riesgo de padecer hambre y desnutrición.

Estamos agradecidos a nuestros aliados que movilizaron recursos rápidamente, lo que permitió a UNICEF responder en pocos días a las necesidades urgentes de los niños, las niñas y sus familias, pero miles de personas siguen necesitando nuestra ayuda.

 

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