Sembrando el cambio en Ruanda
UNICEF llega a los colegios para ayudar a más de 10.000 jóvenes a comprender los desafíos que nos presenta la crisis climática a través de iniciativas sostenibles como el “Proyecto de Escuelas Ecológicas”.
El “Proyecto Escuelas ecológicas” hace a los jóvenes protagonistas de la lucha contra el cambio climático.
Según el Portal sobre el Cambio Climático de Ruanda, el país africano ha experimentado un aumento de la temperatura media de hasta 2,6 grados desde 1971. Los efectos de la crisis del clima son más que evidentes: temporadas de lluvias más cortas e intensas, con las correspondientes inundaciones, y sequías cada vez más frecuentes que ponen en riesgo la vida y el sustento de miles de familias.
El país se enfrenta a un gran desafío y desde UNICEF, queremos que los protagonistas del cambio sean los jóvenes, ya que son los que tendrán que cuidar el planeta en un futuro. Por ello, acabamos de lanzar el “Proyecto de Escuelas Ecológicas”. A través de esta iniciativa, 10.000 estudiantes de diez escuelas diferentes están aprendiendo sobre el cambio climático y descubriendo que un futuro más verde es posible. Y todo gracias a tu colaboración con Unidos por el cambio climático.
La plantación de árboles involucra a los chicos y chicas en el cuidado de la naturaleza.
Una de las actividades que estamos llevando a cabo es la plantación de árboles. A los niños y a los no tan niños les encanta y les enseña la importancia de estar rodeados de vegetación que absorba el dióxido de carbono y prevenga la erosión del suelo, además de ayudarles a comprender el impacto que tienen sus acciones a la hora de cuidar la naturaleza como lo que es: nuestro bien más preciado.
Shalom, una estudiante de segundo de bachillerato que participa en nuestro proyecto, nos dio su punto de vista: “El cambio climático hizo que en nuestra aldea hubiera inundaciones y deslizamientos de tierra, pero ahora, estamos plantando árboles para proteger nuestra escuela y nuestra comunidad”. Y es que los vecinos de la zona saben bien de lo que hablan: “Antes, la tierra era completamente verde y todo estaba cubierto de árboles y vegetación, así que ahora, debemos aportar nuestro granito de arena. ¡Yo ya he plantado más de 30!”, nos cuenta Martin, que también se ha sumado a esta iniciativa.
UNICEF colabora en el cuidado de los árboles plantados en el proyecto.
El “Proyecto de Escuelas Ecológicas” ha hecho posible que los jóvenes planten casi 43.000 árboles por todo el país, pero serán muchos más, porque son todo ventajas. Como nos explica Shalom, “Las zonas de sombra nos van a permitir hacer actividades al aire libre sin pasar tanto calor, y los árboles evitarán que haya tanto polvo en el ambiente y, además, harán que nuestra escuela sea aún más bonita”.
Cada semana, los estudiantes esperan con ilusión que llegue el miércoles, porque ese es el día en el que saben que tienen que ir a clase con ropa de deporte para dedicarse a plantar árboles nuevos y a cuidar y regar los que ya han plantado. Las madres y los padres están encantados, porque además de hacer algo bueno por el planeta, los niños están aprendiendo sobre lo que es la responsabilidad y la disciplina. ¡A nadie se le puede olvidar regar su árbol!
Todas las semanas, los estudiantes dedican un día al cuidado de los árboles plantados.
Por eso, el proyecto es mucho más que una simple iniciativa ambiental, es un movimiento que empodera a los jóvenes para liderar la lucha contra el cambio climático. Al ofrecerles la oportunidad de aprender sobre sostenibilidad y al darles las herramientas y habilidades necesarias, los jóvenes de Ruanda no solo están protegiendo los ecosistemas, sino también alzando la voz para que el resto de la población entienda que la conciencia ambiental es responsabilidad de todos.
El cambio climático es una realidad que no tiene fronteras y se sufre en todos los rincones del planeta. Por eso, desde UNICEF, seguiremos apostando por proyectos sostenibles como este y apoyando a las comunidades más vulnerables para que puedan crecer y vivir en un entorno seguro. El planeta grita, desde UNICEF escuchamos y, gracias a tu colaboración con Unidos por el cambio climático, actuamos.