Tifón en Filipinas: "los niños necesitan toda nuestra ayuda"
Por Kent Page, portavoz de UNICEF en Filipinas
Hoy fui con un equipo de UNICEF a Tacloban, estoy seguro que todos habéis oído ese nombre: es la ciudad de más de 200.000 habitantes que fue destrozada por el súper tifón Haiyan y desde la que están informando la mayoría de los medios.
Y con razón, porque la gente de
Tacloban necesita toda la ayuda posible. Sobre todo los
niños.
Pero quizá no hayáis oído hablar
de la ciudad de Tanauan, que tiene una población de más de 50.000
personas. Tanauan está a unos 30 kilómetros al sur de
Tacloban.
Hasta donde alcanza la vista, no
hay un solo centímetro que se haya librado de la destrucción a lo
largo de 30 kilómetros de carreteras. Y la destrucción total
continúa mucho más allá de Tanauan. Es difícil procesar elimpacto en la vida de la gente, especialmente de
los niños.
Paramos en el ayuntamiento de
Tanauan. Ahora es un centro de salud. El representante del
departamento local de Bienestar Social y Desarrollo había pedido
materiales de refugio y nosotros distribuimos más de 100 lonas de
plástico que ayudan a proporcionar cobijo de la lluvia torrencial y
del sol abrasador.
Ayuda a Filipinas: kits de higiene y bidones de agua
También evaluamos con ellos
algunas de las necesidades más inmediatas, comokits de higiene y bidones de
agua. Estamos además preocupados por el posible brote de
enfermedades y trabajamos con el gobierno y con nuestros aliados.
UNICEF dará apoyo a las campañas de emergencia contra el sarampión,
en los puntos de evacuación donde está la gente que lo ha perdido
todo.
He estado en muchas emergencias
en todo el mundo y es difícil compararlas. Pero el alcance
de los daños aquí es casi imposible de procesar o de
entender. Está en todas partes. Es total. El
camión con bolsas de cuerpos continúa siendo cargado a medida que
se quitan los escombros y el olor que deja a su paso es
abrumador.
Pero hayesperanza y sonrisas en las caras de los
niños, y sabemos que invertir en los niños ahora
contribuye a su aumentar su capacidad de recuperación y la de sus
familias y comunidades.
Queda mucho por hacer aquí, en
Tanauan, en Tacloban y en tantas otras comunidades. Y estamos
haciendo avances, con nuestros aliados y con el gobierno.
Deberíamos tener más buenas noticias mañana.
UNICEF trabaja todo el día, y es increíble formar
parte del equipo. Del equipo en Tacloban, enFilipinas, y el equipo mundial deUNICEF. Todo el mundo está jugando su papel.