UNICEF se prepara para que más de 500.000 niños de Malí regresen a la escuela

Debido al comienzo del nuevo curso escolar en Malí a partir del 1 de octubre, UNICEF está trabajando para que puedan volver a las aulas más de medio millón de niños cuyas vidas fueron interrumpidas por el conflicto, las inundaciones estacionales y la crisis alimentaria.

 

Bajo el liderazgo del Gobierno de Malí y en colaboración con sus aliados, UNICEF está movilizando a los maestros y padres de familia para que los niños vuelvan a la escuelay asegurarles así una educación mejor.
 
En todo el país, cerca de 9.000 maestros recibirán cursos de formación este año académico 2013-2014. Además, se crearán espacios temporales de aprendizaje y se repararán las escuelas que sufrieron daños. Unos 15.000 alumnos utilizarán el nuevo mobiliario adquirido para rehabilitar las aulas. 
 
"Este año escolar en Malí tiene que ser diferente al anterior, por lo que tenemos que hacer todo lo posible para que los niños regresen a la escuela", dijo Françoise Ackermans, Representante de UNICEF en Malí. "Este es un momento crítico. Ha pasado menos de un mes desde las elecciones, así que la población de Malí está muy interesada en la reconstrucción de su país para regresar a su vida normal. Ellos saben que la educación es la piedra angular de este proceso de reconstrucción. ¿Hay algún signo más evidente de que las cosas vuelven a la normalidad que ver a una niña y un niño caminando a la escuela por la mañana?", aseguró Ackermans.
 

800.000 niños de Malí han tenido que interrumpir sus estudios

Según el Ministerio de Educación, se estima que800.000 niños de Malí han tenido que interrumpir sus estudios debido al conflicto, la crisis alimentaria y nutricional, y las inundaciones estacionales. 
 
Françoise Ackermans visitó recientemente las escuelas de Gao, donde 168 niños estaban sentados en el suelo de la clase. "En el norte, muchas escuelas han sido saqueadas y los niños a menudo no tienen otra opción que sentarse en el suelo durante la clase. Más de la mitad de las escuelas en Tombuctú y Gao todavía necesitan materiales escolares y de ocio, como cuadernos y mesas", aseguró.
 
"Mi primer día de clase, el curso pasado, me hizo muy feliz. Pero ahora no tenemos nada", dice Aminata, de 12 años, que viven en Tombuctú. "El miedo se ha ido, pero tenemos un montón de preocupaciones. Las clases están ahí, tengo muchos compañeros que se han quedado y otros que van conmigo a la escuela pero no tenemos nada. Los cuadernos de UNICEF no son suficientes para nosotros. Me gusta estar con mis compañeros de clase. Me gusta el grifo que hay en el patio porque nos da agua potable. Nuestra escuela es muy antigua. Me gustaría que mi escuela se pudiera modernizar. Quiero que UNICEF se quede con nosotros en la escuela'' ha dicho Aminata.
 
En los campos de refugiados ubicados en Mauritania, Burkina Faso y Níger, UNICEF también está trabajando con los gobiernos y otros aliados para proporcionar a 42.973 niños de Malí educación formal e informal. En Mauritania, 7.166 niños refugiados reciben educación formal e informal y casi el 70 por ciento de ellos aprobaron sus exámenes finales el año escolar 2012-2013.
 
Durante todo el verano, se espera que cerca de 4.900 niños refugiados en edad escolar asista a clases de apoyo. UNICEF también ha ayudado a que Ministerios de Educación de Malí, Níger, Burkina Faso y Mauritania garanticen la integración de los estudiantes refugiados en sus sistemas educativos, lo que les permitirá seguir con mayor facilidad la escuela una vez que regresen a Malí
 
La campaña Regresa a la escuela es sólo el primer paso para lograr que todos los niños vayan a la escuela. Aunque la campaña se dirige a los niños que se ven afectados directamente por el conflicto, no podemos perder de vista que más de 1,2 millones de niños en Malí están fuera de la escuela.
 
Para Aminata -al igual que muchos otros niños de Malí-, volver y acabar los estudios siembra el camino a un futuro mejor. "He pensado en el futuro. Mi maestro me ha dicho que si quiero, puedo. Creo que mi futuro será garantizado" , agregó.
 

ATENDER LAS NECESIDADES EDUCATIVAS DE LOS NIÑOS 

Este año, UNICEF necesita 21 millones de dólares para atender las necesidades educativas inmediatas de los niños malienses que se encuentran en Malí, Mauritania, Burkina Faso y Níger. Hasta julio de 2013, sólo se ha recibido el 38% de estos fondos. En Malí, sólo se ha recibido el 27% de los 12 millones de dólares de los fondos requeridos para dar acceso a la educación durante la emergencia.
 
Se necesitan con urgencia fondos para garantizar que los niños afectados por la crisis en Malí tengan acceso continuo a una educación de calidad. La falta de fondos puede hacer peligrar la capacidad de UNICEF y sus aliados para apoyar al Ministerio de Educación en su esfuerzo por lograr que los niños vuelvan a la escuela.