Crisis alimentaria en El Sahel. La historia de Halima Isaka

La familia de Halima Isaka es una de las beneficiarias de la transferencia de dinero en efectivo en Níger. “La cosecha de este año ha sido tan mala que ni siquiera nos ha durado 3 meses”, explica. “Llevamos tres años con escasez de lluvias en esta zona. No tenemos suficientes alimentos para sustentar a nuestra familia”.

La transferencia de dinero en efectivo, cuenta Halima, les ha cambiado la vida. “Antes de que recibiéramos este dinero, nos vimos obligados a recoger hojas de arbustos para alimentar a nuestros hijos”, dice mientras prepara la comida del mediodía para su familia. “Si teníamos suerte, poníamos un poco de maíz en la sopa, pero nos íbamos a la cama con hambre”. “Este proyecto nos ha salvado la vida”, explica.

A tiempo de evitar una catástrofe humanitaria

UNICEF, junto con la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos, el Departamento de Ayuda Humanitaria de la Unión Europea, el gobierno de Níger y otros aliados ha puesto en marcha una intervención de emergencia en eldistrito de Magaria, donde más de 20.000 familias han recibido en los últimos mesesaportaciones en efectivo para su subsistencia. A través de este proyecto, cada madre recibe una mensualidad de 20.000 francos CFA, lo que equivale a 40 dólares, durante tres meses. Save the Childrendesarrolla este programa con el apoyo de UNICEF, ocupándose de ladistribución en estrecha colaboración con los líderes de las comunidades para asegurar que se llega a quienes más lo necesitan. El trabajo con las mujeres es fundamental, ya que tal y como explica Hélene Kouyaté de UNICEF, son las madres las que “están luchando por alimentar a sus hijos”. La acción de UNICEF incluye la distribución (durante los últimos meses) de raciones mensuales de alimentos enriquecidos a las madres con hijos entre los 6 y 23 meses. UNICEF espera empezar a recibir el apoyo de donantes de todo el mundo para expandir el programa a otras regiones de Níger durante 2012, beneficiar a las familias y fortalecer la capacidad del gobierno para responder a las crisis alimentarias. UNICEF España ha abierto ya una vía de colaboración para todos aquellos que quieran contribuir a evitar que la situación se agrave aún más en El Sahel. En toda la región de El Sahel más de un millón de niños menores de 5 años necesitan recibirtratamiento contra la desnutrición aguda grave. UNICEF lleva meses trabajando para evitar que la emergencia se agrave.
 
La escasez de lluvias ha afectado las cosechas y ha dejado en situación precaria a comunidades enteras. Según el análisis de situación realizado durante el verano y el otoño por los equipos de nutrición de UNICEF, siete de los ocho países de la zona presentan focos con tasas elevadas de desnutrición en niños menores de 5 años. Los índices de desnutrición en las regiones más secas deChad y Mauritania,Níger o Mali, requieren una respuesta de emergencia. Comunidades enteras en Burkina Faso, Senegal, el norte de Camerún yNigeria también están en riesgo. El alimento terapéutico es el tratamiento que combate la desnutrición. Por ello, el esfuerzo de UNICEF y sus aliados se centra en conseguir suficiente cantidad de alimento terapéutico de cara a las crecientes necesidades que se esperan para los próximos meses, y así, evitar una emergencia a gran escala. El desafío es grande y, si se consiguen los recursos necesarios para una acción a gran escala, aún se está a tiempo de evitar una catástrofe humanitaria.