Declaración de Leila Gharagozloo-Pakkala, directora de UNICEF para África Oriental y Meridional
“El ataque con granadas a escuelas en Bujumbura, la capital de Burundi, en el que resultó herido un chico de 15 años, es una agresión deplorable a un lugar que siempre debería ser seguro para los niños.
En una época de inestabilidad continua en Burundi, los niños han sido asesinados, detenidos, y continúan en gran riesgo. Los niños tienen el derecho a la protección en situaciones como esta, y nunca deben ser un objetivo. Las escuelas deberían ser respetadas como zonas de paz y refugios seguros para los niños”.