Los niños tienen derecho a crecer en su hogar
Vemos con impotencia y preocupación cómo siguen llegando a nuestras costas personas que huyen de la guerra, la pobreza y la desesperación.
26/09/2018
Muchos de ellos son aún menores, niños o niñas, chicos y chicas, que viajan con algún familiar, o en muchos casos, completamente solos, y que arrastran historias de abusos y peligros, pero también de coraje y determinación.
Desde UNICEF trabajamos para que todos los niños, estén donde estén y en cualquier situación, estén protegidos contra cualquier forma de violencia, puedan ir a la escuela, reciban atención médica y una alimentación adecuada. Y eso incluye ocuparnos de que se cumplan los derechos de los niños que se ven obligados a migrar, y también mejorar la situación en sus países.
No queremos que tengan que venir. Queremos que puedan elegir, que en Nigeria, en Siria, en Honduras,… allí donde les haya tocado nacer, puedan quedarse, crecer seguros y llevar una vida sana y feliz. Que cuando viajen, como lo hacen nuestros chicos, sea para aprender, disfrutar y conocer otros lugares y culturas.
¿Qué hacemos en UNICEF?
Nuestros equipos de UNICEF en terreno trabajan cada día para que, en sus países de origen, estos niños y niñas, chicos y chicas tengan oportunidades de futuro. Trabajamos para que ni ellos ni sus familias se vean obligados a huir porque la falta de agua les ha dejado sin medios de vida, porque la hambruna acecha sus comunidades, porque sus vidas están amenazadas por las maras o por grupos armados que les reclutan, por el miedo a que una bomba reduzca a escombros sus casas y sus vidas, o porque la falta de educación les condena a una vida de pobreza.
Gracias al apoyo de todas las personas e instituciones que se comprometen con UNICEF y con la infancia, mejoramos la vida y las oportunidades de millones de niños, con logros como:
- En Siria, vacunar a más de 3,4 millones de niños menores de 5 años contra la polio entre enero y junio de este año.
- Proporcionar educación a más de 142.000 niños y niñas en Yemen.
- Salvar la vida de miles de niños en República Centroafricana al ofrecer tratamiento para 15.000 de ellos contra la desnutrición aguda grave.
- Suministrar agua potable para más de un millón de personas en Nigeria, en la primera mitad de 2018.
- En Honduras, El Salvador o Guatemala, poner en marcha planes de promoción del deporte que mantengan a los chicos protegidos alejados de las maras.
Sabiendo que cada mochila, cada bidón de agua, cada vacuna, cada tratamiento médico, cada paso hacia la paz y el desarrollo, construye una sociedad mejor para niños y niñas, evitando que su única opción sea escapar a otro país en busca de un futuro.
Ayuda a los niños de Siria a recuperar su futuro
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