La Infancia en Pakistán. Un año después de las inundaciones

La mayoría de pérdidas fueron las de los más pobres, mucho de los cuales no tenían bienes para recuperarse de la devastación. Las inundaciones aumentaron la vulnerabilidad de millones de personas, que, después de un año, siguen luchando para reconstruir sus vidas frente a desafíos extremos.

Las inundaciones de Pakistán de 2010 representan uno de los mayores desastres registrados en términos del número de áreas y personas afectadas. Tras el desplazamiento masivo, millones de personas han regresado —unas, inmediatamente, otras, meses después— a una situación crítica: sin casas, sin comida, sin sustento, sin agua potable o higiene, con infraestructuras dañadas, la sanidad y los servicios sociales empobrecidos.