Pakistán: estudiar en un campamento de desplazados

UNICEF y sus aliados están creando Centros temporales de aprendizaje en las zonas afectadas por las inundaciones en Pakistán con el objetivo de que todos los niños puedan ir a la escuela.

Hasta el momento, se han establecido 1.300 Centros Temporales de Aprendizaje, que beneficiana casi 70.000 niños. El objetivo es llegar a4.000 centros en las áreas afectadas.

UNICEF se encarga de formar a los profesores para trabajar en estos centros,  que además dota de material, como los kits deEscuela en una maleta. Cada uno de ellos contiene todo el material necesario para 80 alumnos de educación primaria.  

Fawad Shah, Oficial de Educación en Emergencias de UNICEF, destacó la necesidad de que los niños reciban una educación adecuada a pesar de las circunstancias. "Esta provincia (Sindh) ha sido testigo de emergencias continuas, los niños ya han perdido muchas jornadas académicas, y no queremos que eso vuelva a suceder", dijo. "Estamos tratando de asegurar que la educación continúe, y los niños tienen tiempo suficiente para ir a la escuela."

Noor Jehan estudia en el campamento de Bukhaira

Noor Jehan, de 10 años, estudia, junto a otros 59 compañeros, en el Centro de Aprendizaje Temporal establecido por UNICEF en el campamento de Bukhaira, en la

provincia de Sindh.

“Uno, dos, tres, cuatro, estamos aprendiendo a contar”, dijo Noor. “La educación aquí es buena, mejor que la escuela del pueblo”.

Su profesora, Shireen, considera que los niños que asisten a la escuela del campamento están más dispuestos a aprender y a participar en actividades académicas y recreativas.

“Los materiales de aprendizaje y recreativos proporcionados por UNICEF están funcionando”, afirma. “Es más fácil enseñar con estos materiales, ya que los niños se implican más”.

Las familias afectadas por las inundaciones se desplazaron al campamento de Bukhaira después de que los niveles del agua subieran en Tando Allahyar, en Sindh, uno de los distritos afectados por las inundaciones. El campamento alberga actualmente a 350 familias desplazadas. Las organizaciones humanitarias proporcionan refugio, alimentos, agua potable y medicinas.

Después de haber perdido sus escasas pertenencias en las inundaciones, la única satisfacción para los padres de Noor es que su hija está recibiendo una educación de calidad en la escuela del campamento.

“Está muy bien que pueda estudiar aquí”, dijo su madre, Mitha Sumar. “Somos gente pobre y no tenemos nada. Esta escuela se ha construido para los niños, lo cual es bueno ya que pueden estudiar en el campamento”.